La solidaridad con MPL de “Juana María de Lara” se vistió de estilista

Aumentan las empresas privadas y sectores de la sociedad civil que observan, apoyan y colaboran con los programas de reinserción social y laboral que lleva adelante el Ministerio de Justicia en los diferentes centros penitenciarios. Estos manifiestan su deseo de contribuir, conscientes de que la plena rehabilitación de las personas privadas de libertad es una vía para evitar la reincidencia en el delito y, consecuentemente, la reducción de la violencia. A eso apunta el Nuevo Modelo Penitenciario, en el que se trabaja en varios frentes.

En este marco, con el deseo de contribuir, estilistas de la peluquería “Samira & Queen” Estética y Peluquería Unisex, de Reinalda Santacruz, hicieron que varias mujeres privadas de libertad (MPL) del Centro de Rehabilitación y Reinserción Laboral “Juana María de Lara”, de Ciudad del Este, estrenaran nuevo look, gracias a los servicios de corte de cabello y peinado que realizaron días pasados.

Los voluntarios ingresaron al centro penitenciario y durante unas horas convirtieron uno de los pabellones en un salón de estética, donde cada interna escogió su propio recorte de cabello para lucir una nueva apariencia.

Actualmente, 74 MPL están recluidas en este penal. Para la directora penitenciaria, Nelsy Centurión, estos procesos son importantes y se dan en el marco de los programas de reinserción y respeto a los derechos humanos.

“Estos espacios son de gran ayuda para las MPL ya que les permite levantar su autoestima desde una renovación de imagen. Esta es la segunda oportunidad en que esta empresa solidaria nos acompaña. Estamos muy agradecidas. En las próximas oportunidades, contaremos con color y tratamientos capilares para casos de caída de pelo”, añadió la directora Centurión.

El Ministerio de Justicia acompaña la reinserción social desde cinco ejes delimitados por el Modelo Nacional de Rehabilitación y Reinserción Social, con distintas guías operacionales en drogas, psicosociología, educación, trabajo y penal–penitenciario, en el tiempo que las personas estén privadas de la libertad.