En una iniciativa para promover la educación y la reinserción social, el Ministerio de Justicia (MJ) y la Universidad Autónoma del Sur (UNASUR) llegaron a un nuevo acuerdo en el ejercicio del año 2025, para ampliar la oferta universitaria y de formación profesional a 43 plazas para personas privadas de libertad (PPL) de la Unidad Penitenciaria Industrial Esperanza (UPIE), con la incorporación de las carreras de Psicología y Ciencias del Deporte, que se suman a la grilla existente.
En el marco del convenio de cooperación, el viceministro de Política Criminal, Víctor Benítez y; la rectora de UNASUR, Mirtha Reyes; sostuvieron un encuentro de coordinación para dar continuidad a las carreras de Derecho y Administración, en vigencia, y además incorporar este año, las carreras de Psicología y Ciencias del Deporte.
La mesa de trabajo, sentó las bases para el diseño e implementación de un plan educativo que contemple las diferentes áreas de estudio, así como un sistema de tutorías y apoyo emocional para los estudiantes privados de libertad.
Es importante señalar que estos estudios cuentan con clases de doble modalidad, presenciales, con docentes en las aulas físicas penitenciarias, mientras que las clases virtuales se dan en línea, con la participación de las PPL estudiantes de intramuros y los alumnos universitarios apostados en las aulas de la UNASUR.
En el 2.025, 13 estudiantes PPL culminarán las carreras de Derecho y Administración. Muchas de ellas han participado en congresos internacionales de forma telemática, obteniendo sus certificados pertinentes. Asimismo, las PPL ingresantes, ya se preparan para el inicio de clases el próximo 24 de febrero.
Participaron de la reunión, la directora de Bienestar y Reinserción Social, Rosalía González; la jefa del Departamento de Educación, Ana Morales; el jefe de Producción Laboral, Guido González. Por UPIE, estuvo el director del penal, Teófilo Barrios; Olga López y María Bareiro.
Este esfuerzo conjunto representa un avance significativo hacia la inclusión y el respeto de los derechos humanos, alineándose con los objetivos de desarrollo sostenible, en el marco del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria.