PPL de la Granja Penitenciaria Itá Porá culminaron curso de horticultor de vivero

El Ministerio de Justicia, con el objetivo de promover penitenciarías productivas y a través de una alianza con el Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP), impulsó el curso de “Horticultor de vivero” en la Granja Penitenciaria Itá Porá, de Emboscada. La actividad concluyó el 20 de diciembre pasado, con participación de 13 personas privadas de libertad (PPL). El 50 por ciento de lo producido será para autoconsumo del penal.

El proyecto de aprendizaje otorga un conocimiento de mando medio, con la creación e implementación de técnicas en la producción de frutas, hortalizas y especies medicinales. Además, ofrece perspectivas laborales una vez recuperada la libertad.

Para el desarrollo del programa, que responde a diferentes retos de productividad, calidad y conservación de los viveros, estuvo Luciano Coronel, instructor del SNPP.

Dicho programa contempló la elección y preparación de terreno con aplicación de abono orgánico y cal agrícola al suelo, siembra y riego de semillas, trasplante de plantines, según la especie, y limpieza de tablones tutorados.

También se ilustró el cuidado y atención en el desarrollo de los plantines hasta la cosecha, control de plagas y enfermedades en hortalizas, modo correcto de preparación y utilización de insecticidas y fungicidas orgánicos.

Las semillas fueron donadas por el capacitador, en tanto los demás insumos utilizados fueron de autogestión de la administración de la institución.

Gustavo Argaña, desde la coordinación de enlace con la Dirección de Bienestar y Reinserción Social, explicó que la actividad aprovechará el gran espacio al aire libre con que cuenta la granja como terapia ocupacional, con los nuevos conocimientos adquiridos en las propiedades físicas, biológicas y químicas del suelo, garantizar el crecimiento radicular del cultivo y apoyar el lado nutricional para el crecimiento activo y cosecha. Esta capacitación tuvo el objetivo, además, de incrementar la sensibilización y los valores del cuidado ambiental.

Se destaca que la mitad de lo producido será destinada para consumir en la penitenciaría y el resto para venta a comercios locales, penales aledaños y particulares.

Las clases tuvieron lugar del 11 de agosto al 20 de diciembre, en modalidad presencial, con una carga horaria de 220 horas. Los estudiantes PPL recibirán sus certificados como flamantes profesionales horticultores.

Este es el cuarto curso con énfasis en la agricultura orgánica dictado en la granja penitenciaria, entre los que se puede citar siembra de frutilla, siembra de maíz y horticultura orgánica. Los dos primeros fueron implementados por el SNPP y, el último, por el Sistema Nacional de Formación y Capacitación Laboral (Sinafocal) y Organización La Victoria.