En lo que va del año, los 45 adolescentes en conflicto con la ley penal que residen en el Centro Educativo Itauguá (CEI) acceden a clases en educación básica y media, mediante un trabajo coordinado entre el Ministerio de Justicia, a través del Servicio Nacional de Atención al Adolescente Infractor (Senaai), y el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC). Además, destacan otros cursos con 40 adolescentes apuntados en marroquinería, fontanería y secretariado ejecutivo y administrativo, dictados por el Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP), así como clases de guitarra.
La vinculación con el sistema educativo del MEC, en el 100% de la población del Centro, es un factor de peso que contrarresta conductas delictivas. En el centro de Educación Básica M-77 se cuenta con 27 matriculados en 4 ciclos en los niveles del 1° al 9° grado, en turnos mañana y tarde. En el centro de Educación Media N° 142 hay 4 niveles con 18 alumnos matriculados, todos los niveles funcionando por la mañana. Las materias desarrolladas a nivel presencial en cada ciclo o nivel se rigen por el Programa de la Educación Básica Bilingüe y Educación Media (MEC) a nivel país. Cabe destacar, además, que varios de los alumnos que han salido en libertad siguen estudiando en la modalidad virtual.
En los cursos de formación de salida laboral con instructores del Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP) las cifras oficiales indican que hay 9 adolescentes participando en el curso de Artesano en Forrado de Cueros y Similares, 10 participantes en el curso de Fontanería (Plomería) y 8 estudiantes en Secretariado Administrativo y Ejecutivo.
Además de los cursos de promoción profesional, desde el área educativa los adolescentes reciben atención psicopedagógica y mediante talleres de Educación Artística realizan Arte terapia con distintas manualidades y clases artísticas. Las cifras oficiales indican que 13 adolescentes participan de clases de Educación Musical con práctica de ejecución de guitarra.
La implementación de programas de justicia restaurativa o reparadora que viene implementando el Ministerio de Justicia, con atención a la resolución de la problemática de la delincuencia enfocándose en la compensación del daño a las víctimas, busca reforzar las capacidades profesionales e institucionales de gestión, atención y seguimiento de los adolescentes en conflicto con la ley, adaptándose a sus necesidades individuales y específicas desde el enfoque restaurativo.
Este trabajo que viene implementando el Ministerio de Justicia cuenta con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación y es coordinado con la Corte Suprema de Justicia, el Ministerio Público y el Ministerio de la Defensa Pública.