Santa misa, villancicos, grupos musicales, bailes improvisados y almuerzos populares impusieron el espíritu de la Navidad entre hombres y mujeres privados de libertad de centros penitenciarios administrados por el Ministerio de Justicia, pidiendo al Niño Jesús que su espíritu renazca en cada uno de ellos.
En el penal de semilibertad Granja Ko’ẽ Pyahu la natividad cristiana tuvo una celebración íntima y sensible con el oficio de una misa. Unos 36 privados de libertad recordaron y elevaron unas plegarias por sus familias en la víspera de la Nochebuena y pidieron al Altísimo por sus sueños. Los mismos recibieron obsequios sorpresas.
Las mujeres del Centro de Rehabilitación y Reinserción Laboral de Mujeres Juana María de Lara, de Ciudad del Este, salieron al patio a tender decorados navideños y extendieron un largo mantel para compartir un almuerzo. Juntas, en oración, 74 mujeres privadas de libertad entonaron cánticos al Niño Jesús. El afamado grupo musical Mandu’arã le puso el ritmo de polca al encuentro hasta culminar con la entrega de pan dulces navideños con apoyo del Club Soroptimist Internacional Alto Paraná y entrega de presentes a cargo del Centro Familiar de Adoración y Shopping París.
Desde el Ministerio de Justicia, personal directivo, agentes penitenciarios y coordinadores de reinserción social acompañaron los festejos de Navidad.